CUENTACUENTOS.

CUENTO SOBRE LA AMISTAD Y EL RESPETO A LOS DEMÁS

Había llegado por fin el gran día. Todos los animales del bosque se levantaron temprano porque ¡era el día de la gran carrera de zapatillas! A las nueve ya estaban todos reunidos junto al lago. También estaba la jirafa, la más alta y hermosa del bosque. Pero era tan presumida que no quería ser amiga de los demás animales.

Ja, ja, ja, ja, se reía de la tortuga que era tan bajita y tan lenta.
Jo, jo, jo, jo, se reía del rinoceronte que era tan gordo.
Je, je, je, je, se reía del elefante por su trompa tan larga.
Y entonces, llegó la hora de la largada.

El zorro llevaba unas zapatillas a rayas amarillas y rojas.
La cebra, unas rosadas con moños muy grandes.
El león llevaba unas zapatillas verdes con lunares anaranjados.
La tortuga se puso unas zapatillas blancas como las nubes.
Y cuando estaban a punto de comenzar la carrera, la jirafa se puso a llorar desesperada. Es que era tan alta, que ¡no podía atarse los cordones de sus zapatillas!
Ahhh, ahhhh, ¡qué alguien me ayude! Gritó la jirafa. Y todos los animales se quedaron mirándola.

Pero el zorro fue a hablar con ella y le dijo:
- Tú te reías de los demás animales porque eran diferentes. Es cierto, todos somos diferentes, pero todos tenemos algo bueno y todos podemos ser amigos y ayudarnos cuando lo necesitamos.

Entonces la jirafa pidió perdón a todos por haberse reído de ellos. Y vinieron los monos, que rápidamente se pusieron a atarla los cordones.

Y por fin se pusieron todos los animales en la línea de partida. En sus marcas, preparados, listos, ¡YA! Cuando terminó la carrera, todos festejaron porque habían ganado una nueva amiga que además había aprendido lo que significaba la amistad.

Fin y colorín, colorón, si quieres tener muchos amigos, acéptalos como son.



CUENTO SOBRE EL AMOR Y LA LOCURA (PARA EDUCAR EN VALORES).

En un lugar remoto del mundo, un día se reunieron en un parque lleno de flores, de árboles, bancos, lagos, ríos... todas las virtudes y todos los defectos que existen. Allí se econtraba la alegría, la tristeza, la amistad, la bondad, la seguridad, el amor...

Todos estaban allí, incluso la pereza. Se pusieron a pensar qué hacer en ese parque tan bonito porque todos se aburrían. Entonces decidieron  ponerse a jugar al escondite, un juego al que todos podrían jugar y en el que todos lo pasarían muy bien.

La idea fue de la inteligencia, que estaba por allí pensando qué podrían hacer para pasar un buen rato y hacer amigos.

Todos se pusieron a jugar, incluso la pereza, que estaba muy cansada como de costumbre.

-"Yo empezaré a contar dijo la generosidad". Que no la importó comenzar ya que era muy generosa y nadie quería empezar.

Contó hasta 100 y empezó a buscar a los demás. Empezaron a salir las virtues y los defectos: apareció la amistad, que se había hecho amiga de la enemistad; la alegría, que aunque la habían "pillado" no quitaba la sonrisa de su cara; y así todas menos una.

-"Falta uno que no hemos encontrado". Dijo la sabiduría.

Entonces se pusieron todos a buscarla y en un bosque, detrás de unos árboles, el amor encontró a la locura, que es la que faltaba. Estaba detrás de una rosa lo que hizo que el amor se pinchara en el ojo con una espina.

MORALEJA: "El amor es ciego y tiene un poco de locura".